A la hora de acceder a un MBA en ocasiones es requisito ineludible enviar una carta de presentación o de motivación como parte de la documentación solicitada para optar a la plaza correspondiente. Hoy vamos a ver cómo redactar esta carta para seducir a quien la reciba y así ganar puntos con ella.
La carta de presentación para un MBA, a no ser que haya indicaciones concretas, no deberá superar una página de extensión. Si es muy larga puede ser que ni siquiera la lean... Así que intenta resumir en este espacio toda tu experiencia académica y profesional si la tienes.
Cuida la presentación. Estás queriendo acceder a un MBA, así que todo cobra máxima importancia. Justifica el texto, deja márgenes adecuados y escoge un tipo de letra claro, tipo Arial o Times New Roman, legible en cuanto características y tamaño.
La redacción debe ser clara, no hagas frases rebuscadísimas y redundantes que realmente no informan y dicen poco de ti. Debes escribir textos concisos y sin florituras. No describas tu currículumo si no que se trata de que la carta sea un apoyo a este, donde se detallen las motivaciones por las que se desea acceder a esta formación específica y las cualidades y aptitudes que te hacen merecedor de ello. Sobra decir que no debe aparecer ninguna falta de ortografía, así que revisa bien tu texto e incluso deja a otras personas que lo hagan. No copies un modelo de carta que encuentres por Internet. La redacción debe ser siempre original.
Por otro lado, evita un lenguaje excesivamente coloquial. Es una carta profesional y como tal debes dirigirte a quien la lea, con respeto y con una redacción cuidada y seria.
La introducción es fundamental. Debes saber captar la atención desde el principio ya que si no, de lo contrario, la persona que reciba tu carta no va a continuar su lectura. Este documento es importante para decidir la admisión o no en el programa formativo, por lo que deberás ser capaz de transmitir tu personalidad y tus ganas, tus motivaciones, todo lo que demuestre, y convenza, de que esa formación te va a ayudar, y mucho, en tu desarrollo profesional.
Es importante que cuentes que eres bueno para convencer a la persona que puede darte la llave del acceso al MBA, pero no es suficiente sólo con decirlo, tienes que demostrarlo. Por eso, incluye ejemplos concretos de logros que hayas conseguido en tu trayectoria académica o laboral, si en el perfil solicitan personas con capacidad de liderazgo cuenta aquello en lo que tú hayas destacado, si has sido delegado de clase, presidente de alguna asociación...
La decisión final para entrar o no en un MBA será la suma de varios aspectos del proceso de admisión, pero los expertos en recursos humanos coinciden en señalar que la carta de presentación suma bastantes puntos o resta, en caso de que no esté bien elaborada.