Hoy vamos a ver cuál es la mejor manera de preparar un examen a través de estos consejos que será importante que sigas para conseguir llegar a la fecha señalada con las mayores garantías de éxito.
Es fundamental que seas organizado, constante y responsable en tu estudio. Para ello puedes elaborar un calendario donde planifiques las jornadas dedicadas al estudio y distribuyas el tiempo lo mejor que consideres para llegar a todo. Ponte un horario para comenzar a estudiar, marca las pausas para parar y estirar tu cuerpo, y ve fijando pequeñas metas para poderlas superar día tras día y el camino no se hará tan tedioso. Prioriza lo importante, asegúrate de que dispones de todo el material para estudiar, tienes todos los temas, apuntes y libros, y siéntate frente a ellos con un plannig establecido. Te ayudará a no perder tiempo en el camino y a avanzar con mayor seguridad.
Para que la memorización sea más productiva y retengas mejor las cosas, estudia una única asignatura a la vez. No por querer abarcar más llegarás mejor, de hecho, no es bueno mezclar conceptos. Organiza tu tiempo de manera que en cada momento concreto dediques toda tu atención a un solo temario.
Una vez sumergidos en la vorágine de clases y rutina puede resultar complicado eso de estudiar día a día para no pegarte el atracón final justo antes del examen. Pero si lo consigues, si eres tenaz y logras memorizar un poquito cada día verás que cuando lleguen las fechas próximas has adelantado un montón más que si te lo dejas todo para la víspera.
El descanso y la alimentación son fundamentales. Debes comer adecuadamente, sano, ligero y equilibrado, para que tu cuerpo se encuentre siempre bien y sepa acompañar a tu mente como ésta merece. Igualmente vital el descanso. Duerme las horas adecuada para despertarte lleno de energía, incluso el mismo día del examen debes descansar; lo que no hayas estudiado hasta ese momento será complicado que lo hagas en la última noche. Haz algo de ejercicio durante la época de exámenes, incluso puedes salir a caminar una media hora entre un tema y otro. Desconectar la mente y el cuerpo es fundamental.
El último día, si todo va bien, deberías dejarlo para repasar y no para memorizar ya nada nuevo. Hazte un resumen con aquello más importante y dedica la víspera del examen a repasar conceptos, ideas y a asentar todo lo que ya has aprendido hasta ese día.
Además de tener ordenada tu mente y tu calendario de estudio, es imprescindible que mantengas el orden en tu lugar de estudio. Ten todo cerca y a mano y siempre lejos la televisión, el móvil o cualquier distracción. Crea un ambiente de estudio donde te encuentres muy cómodo, con luz natural siempre que sea posible; un entorno favorable favorece la concentración.